¿Qué es una trampa de valor?
Una trampa de valor es una acción u otra inversión que parece tener un precio bajo porque se ha negociado con métricas de valoración bajas, como precio/ganancias (P/E), múltiplos de precio/flujo de caja (P/E), CF), o valorados al valor en libros (P/B) durante un período prolongado de tiempo. Una trampa de valor puede atraer a los inversores que buscan una ganga porque parecen poco costosas en relación con los múltiplos de valoración histórica de las acciones o en relación con sus pares de la industria o el múltiplo de mercado prevaleciente. El peligro de una trampa de valor surge cuando las acciones continúan languideciendo o disminuyendo aún más después de que un inversor compra la empresa.
Puntos clave
- Las trampas de valor son inversiones que cotizan a niveles tan bajos y se presentan como oportunidades de compra para los inversores, pero en realidad son engañosas.
- Para una inversión de trampa de valor, el precio bajo también suele ir acompañado de largos períodos de múltiplos bajos.
- Una trampa de valor es una mala inversión porque la razón del precio bajo y los múltiplos bajos es que la empresa está experimentando inestabilidad financiera y tiene poco potencial de crecimiento.
Comprender las trampas de valor
En general, una empresa que ha cotizado con múltiplos de ganancias, flujo de efectivo o valor en libros bajos durante un período prolongado tiene pocas promesas y tal vez ningún futuro, incluso si el precio de sus acciones parece atractivo. Una acción se convierte en una trampa de valor para un inversor si no se realizan mejoras sustanciales en la posición competitiva de la empresa, su capacidad para innovar, su capacidad para contener costos y/o su gestión ejecutiva.
Incluso si una empresa ha tenido éxito en años anteriores, habiendo experimentado mayores ganancias y un buen precio de las acciones, puede caer en una situación en la que no pueda generar ingresos y crecimiento de las ganancias debido a cambios en la dinámica competitiva, falta de nuevos productos o servicios. , aumento de los costos de producción y operación, o gestión ineficaz.
Para un inversor acostumbrado a ver las acciones de esta empresa en una valoración determinada, un precio que parece bajo puede ser atractivo. Los inversores de valor son especialmente susceptibles a las trampas de valor. Al igual que con cualquier decisión de inversión, se recomienda una investigación y una evaluación exhaustivas antes de invertir en cualquier empresa que parezca barata según las métricas de valoración convencionales.
Identificar trampas de valor
Identificar trampas de valor puede ser complicado, pero un análisis fundamental cuidadoso de la acción puede revelar qué es una trampa y qué es una buena oportunidad de inversión. Estos son algunos ejemplos de posibles trampas de valor:
- Una empresa industrial cuyas acciones se han negociado a 10 veces las ganancias en los últimos seis meses, en comparación con el promedio de 15 veces en los últimos 5 años.
- Una empresa promedio cuya valoración ha oscilado entre 6x-8x EV/EBITDA en los últimos 12 meses, en comparación con su promedio de diez años de 12x.
- Un banco europeo cuya valoración ha sido inferior a 0,75 veces su precio en libros durante los últimos dos años, en comparación con un promedio de 8 años de 1,20 veces.