¿Qué es Fabricación contra stock (MTS)?
Make to stock (MTS) es una estrategia de fabricación tradicional utilizada por las empresas para hacer coincidir el inventario con la demanda esperada del consumidor. En lugar de establecer un nivel de producción y luego intentar vender productos, una empresa que usa MTS estimaría cuántos pedidos podrían generar sus productos y luego proporcionaría suficiente inventario para cumplir con esos pedidos.
Puntos clave
- Make to stock (MTS) es una estrategia de fabricación tradicional que se utiliza para hacer coincidir el inventario con la demanda anticipada del consumidor.
- El método MTS requiere un pronóstico preciso de esta demanda para determinar cuánto stock produce.
- Para implementar un enfoque MTS, una empresa debe rediseñar las operaciones en momentos específicos, en lugar de mantener un nivel constante de producción durante todo el año.
- La principal desventaja del método MTS es que si un pronóstico es inexacto, una empresa puede quedarse con muy poco o demasiado inventario, lo que puede afectar las ganancias.
Cómo funciona Make to Stock (MTS).
El método de fabricación contra existencias requiere una previsión precisa de la demanda para determinar la cantidad de existencias que se produce. Si la demanda del producto se puede estimar con precisión, la estrategia MTS es una opción eficiente para la producción.
En teoría, el método MTS es una forma de que una empresa se prepare para los aumentos y disminuciones de la demanda. Sin embargo, los números de inventario y, en consecuencia, la producción, generalmente se obtienen mediante la creación de pronósticos de demanda futura basados en datos anteriores.
Si el pronóstico se desvía un poco, es posible que la empresa descubra que tiene demasiado inventario y liquidez limitada, o muy poco inventario y un potencial de ganancias no alcanzado. Esta posibilidad de error es la principal desventaja de utilizar el sistema MTS para la producción. La información incorrecta puede provocar un exceso de inventario, falta de existencias (inventario no disponible) y pérdida de ingresos. También puede conducir a la incapacidad de satisfacer la demanda, lo que reduce su potencial de ingresos. En industrias aceleradas como la electrónica o la tecnología de la información, el exceso de inventario puede volverse obsoleto rápidamente.
Además, un enfoque MTS requiere que una empresa rediseñe las operaciones en momentos específicos, en lugar de mantener un nivel constante de producción durante todo el año. Este ajuste regular puede ser costoso y el aumento de costos debe trasladarse al consumidor o ser absorbido por la empresa.
La imprevisibilidad inherente de la economía y los ciclos comerciales hace que MTS sea un desafío para cualquier empresa, pero la estrategia se vuelve especialmente desafiante cuando una empresa opera en una industria que experimenta ciclos de ventas cíclicos o estacionales.
Alternativas a Make to Stock (MTS)
Las estrategias de fabricación alternativas comunes que evitan las desventajas de MTS incluyen hacer por pedido (MTO) y ensamblar por pedido (ATO). Ambos vinculan la producción a la demanda, pero en el caso de OMT, la producción de un artículo comienza después de que la empresa recibe una orden de venta válida. ATO es una especie de compromiso entre MTS y MTO: las piezas básicas se construyen por adelantado, pero no se crea un producto terminado hasta que llega un pedido válido.
Ejemplo de fabricación contra inventario (MTS)
Las empresas manufactureras a menudo usan el método MTS para prepararse para períodos de alta producción. Por ejemplo, muchos minoristas, como Target, generan la mayor parte de sus ventas en el cuarto trimestre del año. Para las empresas manufactureras que abastecen a estos minoristas, la mayor parte de su producción debe llegar en el segundo y tercer trimestre del año, para prepararse para una mayor demanda.
Utilizando el método de fabricación MTS, digamos que The LEGO Group, fabricante de los populares ladrillos LEGO y otros juguetes, mira hacia atrás en años anteriores y supone, según datos anteriores, que la demanda aumentará un 40 % en el cuarto trimestre en comparación con el tercero. cuarto. Para prepararse, el fabricante está produciendo un 40 por ciento más de sus juguetes en julio, agosto y septiembre para cumplir con su pronóstico de demanda del cuarto trimestre. Además, durante el cuarto trimestre, LEGO analiza los números anteriores para ver cuánto disminuirá la demanda desde el final del año hasta el primer trimestre del nuevo año, reduciendo la producción en consecuencia.
Si LEGO está adoptando una estrategia MTO, no aumentará la producción de, digamos, sus ladrillos LEGO en un 40% hasta que Target haga un pedido mayor por ellos. Si estuviera adoptando un enfoque ATO, podría tener los ladrillos aumentados terminados y listos, pero no armaría kits completos de ellos hasta que obtuviera el pedido de Target. De esta manera, se mitiga el riesgo de pronósticos de demanda inexactos, ya que tanto LEGO como Target lo comparten.
¿Cuáles son las ventajas de Make to Stock?
Uno de los beneficios clave de la estrategia de fabricación para stock (MTS) es la capacidad de producir inventario en función de la demanda anticipada del consumidor. MTS ayuda a una empresa a evitar tener demasiado o muy poco inventario.
¿Cuáles son las desventajas de Make to Stock?
Para que hacer stock sea una estrategia eficaz, es imprescindible una previsión precisa. Un pronóstico inexacto puede resultar en un exceso de inventario o en la incapacidad de satisfacer la demanda.
¿Cuál es un ejemplo de Make to Stock?
La estrategia de fabricar para almacenar podría ser utilizada por empresas que producen bienes que tienden a ser particularmente populares durante la temporada navideña. Por ejemplo, un fabricante de juguetes pronostica la demanda de los consumidores y fabrica productos en consecuencia.
La línea de fondo
Hacer para almacenar es una estrategia de fabricación tradicional que hace coincidir el inventario con la demanda anticipada del consumidor. La eficacia del enfoque de MTS depende por completo de la capacidad de una empresa para predecir correctamente la demanda futura de sus productos por parte de los clientes. Si un pronóstico no da en el blanco, una empresa puede quedarse con un exceso o un inventario insuficiente, lo que puede tener un impacto negativo en sus resultados.