¿Qué es el estancamiento?
El estancamiento es un período prolongado de poco o ningún crecimiento en una economía. El crecimiento económico real de menos del 2% anual se considera estancamiento y se evidencia en períodos de alto desempleo y trabajo a tiempo parcial involuntario. El estancamiento puede ocurrir a escala macroeconómica o a menor escala en industrias o empresas específicas. El estancamiento puede ocurrir como una condición temporal, como una recesión del crecimiento o un shock económico temporal, o como parte de una condición estructural a largo plazo de la economía.
Puntos clave
- El estancamiento es una condición de crecimiento lento o plano en una economía.
- El estancamiento a menudo resulta en desempleo y subempleo sustanciales, así como en una economía que generalmente se desempeña por debajo de su potencial.
- Los períodos de estancamiento pueden ser de corta duración o de larga duración y pueden resultar de una variedad de factores económicos y sociales.
Entender el estancamiento
El estancamiento es una situación que ocurre dentro de una economía cuando la producción total está disminuyendo, estancada o creciendo lentamente. El desempleo persistente también es una característica de una economía estancada. El estancamiento se traduce en un crecimiento estable del empleo, sin aumentos salariales y sin auges ni máximos en el mercado de valores. El estancamiento económico puede ocurrir debido a una serie de causas.
estancamiento cíclico
El estancamiento a veces ocurre como una condición temporal en el transcurso de un ciclo comercial o un ciclo comercial. Esto podría suceder como una recesión de crecimiento o como una recuperación estancada de una recesión en toda regla. A finales de 2012, tras la Gran Recesión, los defensores de la política monetaria en la Reserva Federal consideraron necesaria la tercera ronda de flexibilización cuantitativa para ayudar a Estados Unidos a evitar el estancamiento económico. Este tipo de estancamiento es cíclico y temporal.
Choques económicos
Eventos específicos o shocks económicos también pueden inducir períodos de estancamiento. Estos pueden ser de corta duración o tener efectos duraderos, dependiendo de eventos específicos y la resiliencia de la economía. La guerra y el hambre, por ejemplo, pueden ser factores externos que provocan el estancamiento. Un aumento repentino en los precios del petróleo o una caída en la demanda de una exportación clave también podría inducir un período de estancamiento de la economía. Sin embargo, algunos economistas, que favorecen la teoría del ciclo económico real, verían esos períodos como un estancamiento esencialmente cíclico.
Estancamiento estructural
Una economía estancada también puede resultar de condiciones estructurales a largo plazo en una sociedad. Cuando se produce un estancamiento en una economía estable, puede ser mucho más permanente que cuando se produce a causa de crisis económicas o en el transcurso de un ciclo económico normal.
El estancamiento puede ocurrir en una economía avanzada con madurez económica. Las economías maduras se caracterizan por un crecimiento demográfico más lento, instituciones económicas estables y tasas de crecimiento más lentas. Los economistas clásicos se refieren a este tipo de estancamiento como un estado estacionario y los economistas keynesianos lo ven como el estancamiento secular de una economía avanzada. Los factores institucionales, como el poder arraigado entre los grupos de intereses especiales establecidos que se oponen a la competencia y la apertura, pueden provocar el estancamiento económico. Por ejemplo, Europa occidental experimentó este tipo de estancamiento económico durante las décadas de 1970 y 1980, denominado euroesclerosis.
Por el contrario, el estancamiento puede afectar a las economías subdesarrolladas o emergentes. El estancamiento persiste en estas economías debido a la falta de cambio en las instituciones políticas o económicas donde no hay incentivos para adaptarse y crecer. Además, las economías emergentes o subdesarrolladas pueden quedar atrapadas en un equilibrio estático debido a factores económicos o institucionales, como la maldición de los recursos o el comportamiento depredador de las élites locales.
Las características culturales y demográficas también pueden contribuir al estancamiento económico. Una cultura de poca confianza puede obstaculizar el desempeño económico al desalentar el cumplimiento de los contratos y los derechos de propiedad. Como resultado, una población con (en promedio) menor escrupulosidad, menores capacidades cognitivas generales o altas tasas de enfermedades endémicas y debilitantes puede experimentar un crecimiento económico más lento.