¿Qué es un accionista activista?
Un accionista activista es una persona que intenta utilizar sus derechos de accionista en una empresa que cotiza en bolsa para realizar cambios en o para la empresa.
Puntos clave
- Los accionistas activistas son accionistas de empresas que realizan cambios en o para una empresa.
- Estos cambios abarcan una amplia gama, desde las preocupaciones ambientales hasta la gobernanza, la distribución de utilidades, la cultura interna y el modelo comercial de una empresa.
- Los accionistas activistas suelen comprar una participación minoritaria en una empresa y posteriormente emplean una variedad de tácticas, desde la presión de los medios hasta amenazas de litigio, para forzar una conversación y lograr un cambio.
Entendiendo a un accionista activista
El activismo de los accionistas es una forma en que los accionistas pueden influir en el comportamiento de una empresa ejerciendo sus derechos como propietarios parciales. Las clases de acciones permiten distintos privilegios de voto, además de los derechos de dividendos.
Si bien los accionistas minoritarios no administran las operaciones diarias, existen varias formas de influir en la junta directiva de una empresa y en las acciones de la gerencia ejecutiva. Estos métodos pueden variar desde hablar con ejecutivos hasta propuestas formales, que son votadas por todos los accionistas en la reunión anual de una empresa.
Los accionistas activistas también emplean una variedad de tácticas ofensivas para forzar el cambio. Por ejemplo, podrían hacer un uso estratégico de los canales de los medios para publicitar sus reclamos y solicitar más presión de otros accionistas. También pueden amenazar a las empresas con acciones legales si no se les permite dar su opinión.
Algunos de los problemas que enfrentan los accionistas activistas se relacionan con el cambio social, que requiere la desinversión de partes políticamente sensibles del mundo, por ejemplo, un mayor apoyo a los derechos de los talleres clandestinos y/o una mayor responsabilidad por la degradación ambiental.
Pero el término también puede referirse a inversionistas que sienten que la administración de una empresa está haciendo un mal trabajo. Esta clase de inversionista activista a menudo intenta obtener el control de la empresa y reemplazar a la gerencia o forzar cambios corporativos importantes.
Uso del activismo de los accionistas
A lo largo de los años, el activismo de los accionistas ha aumentado en el capital total empleado y en el número de campañas organizadas. Según el Foro de Gobierno Corporativo de la Facultad de Derecho de Harvard, 2018 fue un año récord para los accionistas activistas. Se desplegaron aproximadamente $65 mil millones de capital durante el año, con campañas que comenzaron a aumentar a 250 y el número de inversores aumentó de 110 en 2017 a 130 en 2018.
Estos datos representan un aumento «modesto» con respecto al año anterior, otro récord. Los accionistas activistas también están llegando a las fronteras para hacer campaña. El mismo informe encontró que el 60 % de las campañas se dirigían a empresas estadounidenses, mientras que el 25 % se dirigía a empresas europeas y el 10 % a empresas de Asia Pacífico.
Ejemplos de accionistas activistas
Carl Icahn es uno de los accionistas activistas más destacados del sector financiero, junto con su labor como empresario, inversor tradicional y filántropo. En la década de 1980, el Sr. Icahn desarrolló una sólida reputación como «merodeador corporativo».
Esto se debió a su adquisición hostil de la aerolínea TWA en 1985, entre otros hitos. Junto con Texaco y American Airlines, TWA era una de las aerolíneas más grandes del país en ese momento. El Sr. Icahn se hizo cargo con éxito de la empresa y la sacó del borde de la bancarrota durante un período de varios años.
De manera similar, Bill Ackman se considera un inversionista activista (aunque algunos lo considerarían principalmente un inversionista contrario). Una de las posiciones de más alto perfil de Ackman fue su breve posición y la emisión de una gran campaña de relaciones públicas contra la compañía Herbalife en 2012.
En contraste con el Sr. Icahn y el Sr. Ackman, muchos fondos de cobertura han presionado recientemente por un cambio relacionado con las preocupaciones ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) de sus socios. Trian Partners, Blue Harbour Group, Red Mountain Capital Partners y ValueAct Capital se encuentran entre los principales fondos que han priorizado ESG en varias formas.
Algunos de estos fondos son impulsados por sus inversionistas, quienes buscan ser propietarios de empresas que demuestren un compromiso con la responsabilidad social corporativa. Esta responsabilidad puede tomar la forma de preocupaciones ambientales como el cambio climático o preocupaciones de gobierno, como la diversidad de la junta.
Por ejemplo, el Fondo de Pensiones de la Ciudad de Nueva York ha iniciado un Proyecto de Responsabilidad de la Sala de Juntas sobre la diversidad de la junta que requiere que las empresas divulguen la raza, el género y las habilidades de sus directores.